Alrededor de la primera década, en éste viaje, la vida, se
dio el encuentro con las seis cuerdas…allí comenzó lo que pausado a veces y en
otros momento más intensos, sería parte del vehículo que me trasladaría por
este camino.
Bandas fortuitas y fugaces en el barrio y el colegio, entre
juegos y clases iban definiendo, sin querer queriendo, gustos, formas, lo que
se quiere con esto de la música y lo que no (al día de hoy suele suceder…) en
medio de canciones, guitarras, bandas y grupos favoritos del momento y otros
que siguen gustando a la fecha…
Y llegó el momento de marcar mejor el camino para tomar el
paso firme y andar la senda, entonces apareció “La Canción” protagonista, situándose adelante, tomando la posta y
poniéndonos bajo su guía…Fue el encuentro, donde decidimos que no había espacio
para los dos en el primer lugar, y que la manera de avanzar y seguir abriendo
camino, sería Siendo Uno…
Llegar a tal punto abrió el horizonte y el basto universo,
allí comencé a ver, como un precipicio desde el borde del abismo, que delante
habían infinitas posibilidades, y al mismo tiempo como afirmándome sin
sujetarme y forzarme, estaban muchas otras facciones que no había notado al
principio, claro, hablando siempre de “La
canción”…
Hoy veo a “La canción”, la música, en si misma con todas sus
manifestaciones, el camino, a mi mismo, como algo único e indivisible, el modo
en que transcurren mis días, con sus matices…
Siento esta unidad como medio de vida, aprendizaje,
sanación, transformación, compartir…
Para mi “La canción” y por su puesto “La música” es un
camino por el cual voy transitando este viaje que es la vida, en este tramo lo
que dure transitar la senda, y a través de ello sanar, trasformar todo en
canción y que la canción transforme todo, compartir, ser feliz, y sobre todo,
con lo que ello implica…¡VIVIR BIEN LA VIDA!
¿Buscas información más técnica? Bueno…Mi formación musical
puede definirse como “autodidacta” ya que al día de la fecha sigo aprendiendo y
considero que así será (no veo otro modo) hasta el tiempo indefinido hora tras
hora de práctica y estudio…También parte de está capacitación fue y es
impulsada por las incontables horas de compartir música en diversos ámbitos
como ser rondas de guitarra con amigos, conocidos y desconocidos, gente de
variados gustos, modos, provincias y países, las clases y los alumnos, realizar trabajos conjuntos en
bandas y agrupaciones algunas más duraderas que otras como así también formar
parte de colectivos culturales, y yendo hacia otra dirección, las horas de
grabaciones en mi estudio de materiales propios y ajenos, participaciones como
invitado y prestar el oído a amigos músicos contándome sobre su arte,
preferencias y formas de tocar y hacer sus trabajos…
Considero, como en cualquier ámbito de la vida, que un hecho
vale más que mil palabras por eso mismo antes de intentar aburrirte más con
historias contadas desde el punto de vista subjetivo del narrador, te invito a
recorrer este sitio y conocer más de los hechos y enriquecerlo desde tu punto
de vista de observador!
¡Gracias por su tiempo y permitirnos completar esta ronda
compartiendo!
